
Es urgente evitar la cooptación de luchas rurales justas por quienes, como SOS Rural, sólo buscan protagonismo para impulsar una agenda reaccionaria en el campo. Aprovechan la debilidad organizativa para ofrecer su músculo económico y mediático.
No sólo por sus postulados, también por su financiación los conoceréis. El capital agrario del Campo de Cartagena aprobó en 2023 financiar con 2,4 millones de € a la Fundación Ingenio, lobby matriz de SOS Rural, que es su extensión nacional (ver aquí)
El carácter de lobby de SOS Rural / Fundación Ingenio, es decir, de grupo de presión política al servicio de unos intereses particulares, lo muestra con claridad el destino de su presupuesto: comunicación. Es fácil encontrar decenas de noticias en prensa pagadas por SOS Rural.
En algunas publicaciones afirman que ellos no tienen partido, respondiendo a acusaciones acerca de los evidentes vínculos ideológicos y programáticos con Vox. Que su partido son los agricultores. La pregunta sería que entienden por agricultores, ni si son todos los agricultores. La realidad es que su partido es el de los capitalistas agrarios y conservadores. Es un hecho: defienden los intereses materiales y simbólicos de estos.
Es importante establecer un horizonte para las luchas por el mundo rural que sea transformador y de enfoque comunitario-popular. La soberanía alimentaria, la agroecología o el cooperativismo son elementos a tener en cuenta.